Fue tanta la expectación, que los servidores de Netflix colapsaron con el estreno de Luke Cage, la nueva serie y coproducción de Netflix y Marvel, que debutó apenas hace algunos días en televisión. La trama está emparentada con otras series de la alianza, comoJessica Jones y Daredevil, que a su vez coexisten en el universo del nuevo superhéroe negro.
Este último aspecto no ha pasado desapercibido por los televidentes. En el reparto, destacan Simone Missick, Mahershala Ali, Eric LaRay Harvey, Alfre Woodard y Sônia Braga, todos afroamericanos que acompañan a Mike Colter como Luke Cage, el héroe que desde la minoría intenta defender su espacio y el de su barrio, el Harlem.
El relato y la causa racial han levantado suspicacias entre algunos televidentes blancos, que se han quejado de cierto “racismo al revés”. Twitter ha sido el caldo de cultivo de estos comentarios, como el siguiente: “La falta de gente blanca en Luke Cage me hace sentir incómoda. Este espectáculo es racista, ¿cómo funciona esto Netflix?“.
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